via Ruta 66
Conocido por la mayoría como el guitarrista de Band of Horses en la última década, además de compositor de algunos de sus temas, Tyler Ramsey contaba sin embargo con una carrera solista anterior que ahora ha recuperado tras abandonar la banda. Hace unos meses que publicó un nuevo álbum en solitario, For The Morning, un atractivo trabajo repleto de luz pero también de melancolía e introspección. Aprovechando su próxima visita a nuestro país (14/11 en Sidecar, Barcelona; 15/11 en Café La Palma, Madrid, dentro del Ciclo Momentos Alhambra; 16/11 en La Lata de Bombillas, Zaragoza, y 17/11 en 16 Toneladas, Valencia), en la que estará acompañado de la joven cantautora Maren, hemos hablado con él de su último álbum y de su carrera en general, tanto en solitario como en su larga etapa con Band of Horses.
La mayoría de la gente te conocerá, sobre todo, por ser guitarrista y compositor en Band of Horses durante los últimos años, pero antes de ello ya tenías una carrera en solitario. Háblanos de tus inicios.
Empecé tocando el piano cuando era joven, y después me pasé a la guitarra. Me encantaban los guitarristas solistas, especialmente los que tocaban la guitarra acústica. En mi primera banda toqué tanto el teclado como la guitarra, pero también el bajo. En un momento dado decidí empezar a componer mis propias canciones y arrancar mi propia carrera, lo que finalmente llevó a mi primer disco en solitario. For The Morning es mi cuarto disco.
¿Y cuándo empiezas con Band of Horses?
He estado en Band of Horses durante los últimos diez años.
Durante algún tiempo fuiste capaz de compaginar tu carrera en solitario con tu trabajo en la banda. Me imagino que sería complicado, sobre todo porque en Band of Horses también ejercías como compositor.
Era complicado sobre todo encontrar tiempo para girar y promocionar mis propios discos. El grupo salía mucho de gira, lo cual no me dejaba mucho tiempo para hacer nada más.
Supongo que por eso a partir de 2011 ya no publicaste ningún material nuevo en solitario y te dedicaste exclusivamente al grupo.
En 2011 lancé The Valley Wind y después hice un par de discos con ellos. De todos modos no dejé de escribir canciones, pero no publiqué ninguna hasta que no estuve seguro de tener el tiempo y la energía para sacar adelante mi propio álbum.
Y ese momento ha llegado en 2019, 8 años después de tu anterior disco. Cuéntanos cómo ha sido el proceso de gestación de For The Morning. He leído historias sobre tu retiro en el bosque que me recuerdan a la de Bon Iver con su primer álbum.
Lo cierto es que fui escribiendo esas canciones aquí y allá, algunas de ellas incluso durante las últimas giras de Band of Horses. Otras muchas las compuse a raíz del nacimiento de mi hija y los cambios que introdujo en mi vida. Ahora vivo en el campo y he construido allí un estudio en el que paso bastante tiempo escribiendo y grabando.
Me parecen canciones muy visuales. Quiero decir, es muy fácil evocar diversas imágenes sobre la naturaleza y la vida campestre mientras escuchas ciertos temas. ¿Estás de acuerdo?
Sí, hay muchos elementos visuales en estas canciones. Especialmente en “White coat”, que toma forma a partir de los paisajes montañosos cercanos a mi casa por los que suelo pasear.
Háblame de la canción “Evening country”. Diría que es una especie de nueva interpretación de “Evening kitchen”, uno de los temas que compusiste para Band of Horses.
Es cierto, lo es. La tocaba en vivo con mi banda y la canción sonaba realmente diferente tal como nosotros la interpretábamos, nos parecía que quedaba muy bien. Sentí que era importante incluirla en el disco.
Tienes un gran sentido de la armonía y la melodía. Me pregunto qué te viene primero a la mente, si compones primero las letras y después la música o esperas a tener una buena melodía antes de escribir el texto.
No tengo un método ni una lógica la hora de componer. En realidad el procedimiento cambia de una canción a otra. ¡Es como un desafío!
En tu disco hay varios invitados. Están Joan Shelley o Gareth Liddiard, entre otros. Me pregunto por qué buscaste músicos y cantantes adicionales, teniendo en cuenta el carácter íntimo y personal de tus composiciones. Las imagino perfectamente interpretadas por ti mismo al piano o con la guitarra, sin ningún otro aditivo.
Al componer estas canciones imaginaba para ellas una gran cantidad de armonías vocales, y además me apetecía construirlas usando distintas voces. De todos modos me encanta también colaborar con otros músicos, enseñarles mis canciones y ver qué cosas nuevas e inesperadas pueden aportar.
Por cierto, encuentro tu forma de tocar la guitarra muy personal. Me pregunto cuáles pudieron ser tus influencias, incluso tus ídolos.
Mis influencias vienen principalmente de guitarristas solistas que practican el fingerpicking con la guitarra acústica. Me encantan las composiciones instrumentales para guitarra, escucho bastante ese tipo de música. En mis inicios caí rendido ante gente como Michael Hedges y Alex De Grassi. Aunque la gente calificara su música como New Age, para mí lo importante era la elaborada composición de sus obras para guitarra.
Volvamos a tu disco. El título, For The Morning, me hace evocar esos momentos de duermevela cuando empiezan a asomar las primeras luces del día y el sueño y la vigilia se confunden.
“For the morning” fue la primera canción del álbum que terminé totalmente, y me pareció un título que encajaba bien con el estilo del disco. Aunque pienso que estas canciones funcionan bien a medianoche, a mediodía, o en cualquier momento de la jornada.
En breve vienes a España a presentar el nuevo disco. ¿Lo harás en solitario o con banda? ¿Será un show eléctrico o acústico?
¡Me hace mucha ilusión tocar en España! Iré con mi banda: Brian Landrum (pedal steel, guitarra, coros), David MacInnes (bajo, coros) y Kevin Rumley a la batería. De todos modos a lo largo de la actuación intercalaré también algún tema en acústico. ¡Lo mejor será que vengas a los conciertos y lo veas por ti mismo!
Texto: Fidel Oltra